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Desde este mes, INEAVA incorpora el AMPS a su protocolo de valoración del paciente neurológico.Esta valoración estandarizada de terapia ocupacionalnos ayudará a planificar las intervenciones de todo el equipo. 

AMPS (Assessment of the Motor and Procedural Skills) - Valoracion de las Destrezas Motoras y del Procesamiento 

El mundo de la rehabilitación y el de la Terapia Ocupacional especialmente, han dado un paso muy importante tras la consolidación de este novedoso instrumento de evaluación. 

Desde su concepción inicial, hace aproximadamente 20 años, contando con la colaboración de la Asociación Nacional Americana de Terapia Ocupacional, el AMPS o Valoración de las Destrezas Motoras y del Procesamiento, puede considerarse como la primera evaluación estandarizada que permite valorar cualitativamente la manera en la que una persona ejecuta las diferentes tareas que componen las Actividades de la Vida Diaria (AVDs). 

Los criterios utilizados para evaluar dicha calidad en el desempeño de las AVDs a través de esta evaluación son el esfuerzo, la eficiencia, la seguridad y el grado de autonomíarequeridos. 

Es importante saber que el AMPS, a diferencia de la gran mayoría de escalas de evaluación funcional, no está diseñado ni para medir aspectos neuromusculares, biomecánicos o cognitivos (fuerza, memoria...) ni tampoco para medir habilidades o destrezas (capacidad de prehensión, capacidad para memorizar…).

Los elementos que el AMPS permite evaluar científicamente a través de la observación y una posterior cotación numérica, son la actividad y la participación. De ahí su carácter extremadamente innovador. 

Los resultados obtenidos bajo, insistimos, criterios científicos, permiten al terapeuta, entre otros aspectos: 

• Determinar el nivel de exigencia funcional en las AVDs al que se puede someter a la persona evaluada.
• Orientar y elegir con garantías clínicas el enfoque de tratamiento (rehabilitación funcional, medidas compensatorias, adquisitivas, etc).
• Confirmar y establecer la evolución clínica gracias al tratamiento recibido, es decir, medir objetivamente la evolución de la persona.