Blog INEAVA

Este sábado contamos en nuestro centro conLeandro González Pizarro, quien,  nos habló sobre la valoración del desarrollo neurocinesiológico humano.
Apoyándose en un par de vídeos de niños con discapacidad motora, nos hizo reflexionarsobre nuestra práctica profesional en el momento de valorar a nuestros pacientes, y por tanto de establecer los objetivos de nuestra intervención.

Fue capaz de transmitirnos las siguientes concisas y eficaces ideas:

• Debido al efecto de la gravedad (en condiciones normales) sobre el ser humano, el desarrollo neurocinesiológico humano sigue unadirección céfalo-caudal. Por tanto, a la hora de analizar y describir los problemas del paciente, recomienda seguir también este orden.
• Pero, ¿de todos los problemas, cuál es el principal? Esto no siempre nos resulta fácil. La secuencia del desarrollo neurocinesiológico humano normal, o más bien, el alejamiento de esta secuencia, es el que determinará el problema principal del paciente. Muchas veces enumeramos una larga serie de problemas del paciente... pero esto es poco funcional. Es importante conocer cuál es el problema principal, del cual dependen el resto de problemáticas.
• Determinar el problema principal del paciente nos ayuda, por ende, a determinar también el objetivo principal de nuestra intervención. Resulta poco funcional establecer una larga lista de objetivos terapéuticos, que, evidentemente no pueden ser abordados todos en una misma sesión o que si se abordan alternativamente en cada sesión, al final se intenta tocar todo, para no profundizar en ninguno.Importante: marcarse un único objetivo, concreto y a corto plazo.

Leandro bebe de los principios terapéuticos de Bobath, Vojta y Castillo-Morales, de quienes aprendió directamente la capacidad de observación, valoración y los principios de una intervención integral.